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Juventud

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Área Juventud

Persona Responsable: Raúl Brandan

En el país se percibe la ampliación de una «brecha generacional». La juventud va ganando ascendencia como promesa de cambio; y somos los jovenes quienes vivimos mas cabalmente la tan ansiada; y temida, modernización socio-cultural.

La experiencia acumulada durante estos años a través de la juventud de antes, de hoy y de siempre; y en particular la juventud sindical hace necesaria o quizás evidente la forja de la juventud como Movimiento Social, lo cual implica compromiso protagónico de los jóvenes organizados por salir mas allá de su microentorno, para ubicarse desde el ante un contexto mas amplio.

El protagonismo es particular en política, que consiste en tener como parte de la sociedad al poder del Estado.Creemos que es utilizar el poder en beneficio del bien común y en particular de los excluidos y marginados de la sociedad. Los jóvenes nos encontramos en el centro de los cambios y forjamos formas propias de la sociabilidad.

Como consecuencia a esta renovación global; que venimos atravesando; la Asamblea General de las Naciones Unidas proclamo el día 12 de Agosto el día internacional de la juventud

Los Jóvenes y la Política

La participación de los jóvenes en materia política es escasa. A diferencia de épocas anteriores, la juventud de hoy vuelca sus intereses en otros ámbitos, cuando no se ve arrastrada hacia diferentes formas de vacíos. Esto último como consecuencia de fallas en el funcionamiento de algunas instituciones básicas como la familia o el Estado.

Dentro de los obstáculos que dificultan el acceso de las nuevas generaciones al espacio político se destacan el hedonismo y la crisis socio-económico-política.

Junto a la globalización y la era digital, una nueva ola de valores se apodera de nuestra cultura. En un mundo cada vez más chico y competitivo el materialismo hedonista es el principal estimulo de vida contemporáneo. “Tener” es la primera y principal pauta de comportamiento del periodo. Y el consumismo es un remolino vertiginoso que hipnotiza la mirada de los jóvenes. El acto narcisista de mostrar ese exterior tiene como referentes a modelos, artistas, deportistas y personajes de reality show.

Desplazado el Estado benefactor, el mercantilismo liberal impuso sus códigos morales. La cohesión social y sus estructuras se fueron desintegrando, cediendo el paso a nuevos actores. La televisión en jefe de familia, banda ancha las 24hs y un sistema educativo jaqueado atentan contra la salud cultural de nuestra juventud. La ecuación es simple: sin cultura no hay política. Es decir, no hay estímulos ni valores que movilicen al ser humano en una manifestación activa y positiva.

“Parece obvio decir que la juventud forma parte de la sociedad, pero lamentablemente ello no siempre se ve reflejado en la práctica.”

A lo anterior debe sumársele la libre asociación, hecha por muchos, de la política con la corrupción y la idiosincrasia. La política aparece como una actividad ingrata en la cual no vale la pena involucrarse. Un reduccionismo conceptual que aleja a muchos jóvenes de la perspectiva de participación y construcción solidaria. Así el acento esta puesto en lo individual. Con el “sálvense quien pueda” transformado en modelo social para nuestra juventud, la realización se convierte en un proceso personal y la acción colectiva se extingue.

La situación exige acciones coyunturales que permitan ir recuperando el terreno perdido. Nuestra sociedad necesita de jóvenes que se manifiesten de manera activa para poder progresar en los planos político y socioeconómico. Debemos ser los jóvenes el motor fundamental de lucha de ese cambio. Para ello necesitamos una juventud capacitada, motivada y organizada. Una juventud que no se preocupe tanto por el tamaño de la memoria de su celular ni este obsesionada por las visitas a su facebook o twitter, sino una que pueda saber quién era Karl Marx o Juan Domingo Perón. Una juventud que, en lugar de interesarse en ingresar a un boliche con una botellita de agua mineral en la mano, muestre mayor preocupación por involucrarse en actividades culturales y de integración social. Una juventud que represente lo que realmente vale la pena representar: la buena salud, física y mental, de nuestra sociedad.


Encuentro Juvenil 2013

 

 


Encuentro Juvenil